La importancia de un buen jingle

Seguro que alguna vez has tarareado el “Yo soy aquel negrito” del popular anuncio de Cola Cao, o la canción de las muñecas de Famosa. Estas sintonías ayudan a que una marca o un spot determinado queden impresos en nuestra mente. En jerga publicitaria son denominadas “jingles” y su objetivo no es más que el de transmitir un mensaje publicitario de una manera musical y entretenida. El jingle se aloja en la mente del espectador y, junto a él, el producto o la marca anunciada.

Existen estudios que afirman el extraordinario poder de fijación de la música en la mente frente al de la palabra hablada.

Entre la década de los años 50 y 70 el jingle vivió su época dorada. Las marcas comenzaron a bombardear a la población con sus temas musicales, siempre acompañados de una simpática y pegadiza rima. En una época en la que la población se encontraba saturada de información, esta técnica publicitaria ayudaba a que los espectadores recordaran fácilmente el mensaje.

La pregunta es: ¿Por qué los jingles funcionan?

La efectividad de la técnica del jingle reside en su musicalidad y la facilidad para ser recordado, además de poder repetir varias veces el nombre del producto o marca anunciada sin llegar a ser pesado. Esta técnica facilita la creación de lazos afectivos entre el espectador y la marca anunciante. Los anuncios cantados resultan menos repetitivos y pesados que el resto y, por lo tanto, son más persuasivos.

Es así como surgirá el “blink”.  Un spot ultra breve (En ocasiones no supera los 2 segundos de duración) que el espectador reconoce justo después de que éste haya terminado. En ocasiones contienen una fugaz melodía de 6 notas (como es el caso de la aseguradora Línea Directa), la cual permite la asociación directa con la marca.

Así pues, dejando de lado esta última variante, los jingles pueden ser creados desde cero por las propias marcas, o bien tomando una melodía ya existente. Sin embargo, el uso de esta técnica puede acabar generando el efecto contrario que esperábamos. Es el caso del popular anuncio de la operadora móvil argentina CTI, de la agencia Young & Rubicam, la cual creó un jingle en el que trataba de ironizar los populares temas del verano. La sintonía del spot terminó convirtiéndose en aquello de lo que trataba burlarse.

Otro ejemplo es el de la compañía Movistar, la cual, utilizando un tema ya existente como es el “Ma Cuale Idea” de Pino D’Agio, creó el jingle para su campaña. El spot fue obra de la agencia McCann Erikson en asociación con la productora Lee Films y acabó siendo todo un himno del verano de 2007 en España.

Por supuesto, no podía faltar en el ranking de los jingles más pegadizos la decana de la publicidad. ¿Quién no recuerda la popular sintonía de la marca de refrescos Coca Cola? A continuación os dejamos algunos de sus spots más famosos. Todos, por supuesto, con su canción.