Los buenos tiempos para Volskwagen llegaron al ganar premios de publicidad importantes bajo la tutela de Arnold Worldwide, con sede en Boston. Y la publicidad de VW tuvo una buena racha desde mediados de la década de 1990, con estantes repletos de premios por su eficacia y creatividad.
Hace algunos años, una promoción ofrecía un iPod de Apple en la compra del New Beetle. El titular sacaba provecho de las semejanzas en diseño, funcionalidad y tecnología entre el iPod y el New Beetle, como una manera de recordar a la gente lo que hace especial al coche.
Esta fue la evolución de la campaña:
Para el año 2003, Volskwagen y su agencia Arnold Worldwide se dieron cuenta de que el New Beetle estaba pasando a la historia ya que tenía 5 años. Los nuevos productos como el Mini Cooper robaban su puesto como el automóvil más codiciado. El existoso lanzamiento de la versión descapotable a principios de ese año también había menguado y mucho la cuota del rígido.